La Funeraria Malagón oferta ataúdes en la banqueta cerca del hospital 194 del IMSS que opera como unidad Covid-19.
"Nosotros solo acercamos el servicio funerario a los dolientes", señalaron empleados de la Funeraria
En la banqueta de la avenida Gustavo Baz, casi con esquina del callejón del Beso, en puestos callejeros se ofertan ataúdes de madera, uno de ellos mide tres metros y sus puertas de cristal fueron selladas el 14 de junio por autoridades de Naucalpan con la leyenda ‘Suspensión temporal’.
LEE MÁS: VIDEO: '¡A huevo, acábala!' Gritan a pelea entre niñas en CDMX
El local fue cerrado por las autoridades de Naucalpan, hasta que los propietarios demuestren tener licencias para operar en el sitio, el que tiene exhibidores para 12 ataúdes, uno encima de otro, mientras que a un lado permanece abierto un local más amplio de la funeraria.
"Cuando la gente sale dolida, llorando del hospital por la muerte de un ser querido, nosotros somos una opción cercana y económica para que resuelvan la emergencia de sepultar o incinerar a su ser querido", señaló un empleado del segundo local que continúa abierto.
Este local está abierto y ubicado en un puesto callejero también sobre la banqueta de lo que era un jardín, donde hay un puente peatonal que cruza la avenida Gustavo Baz.
LEE MÁS: En Uber, menor de edad da a luz
Por 13 mil pesos esta funeraria ofrece el servicio de embalsamado, ataúd, carroza y traslado de dolientes a los panteones cercanos de San Andrés Atoto y Río Hondo, informó el empleado.
LEE MÁS: Autoridades dicen que no se quemó ningún expediente de la Línea 12